sábado, 14 de julio de 2007

1989

Llegó el ´89 y los conciertos prosiguieron, especialmente los domingos en el teatro.Arlequines, del barrio de San Telmo, un lugar que marcaría el despegue de Hermética. Hay que mencionar que esta fue la banda que le abrió las puertas al rock pesado en ese lugar, donde hoy toca todo el mundo, hasta bandas extranjeras como Biohazard. Muchas bandas tuvieron la oportunidad de telonear a Iorio y Cía. En aquellos momentos; entre ellas estuvieron Doppler, 666, Militia, Genocidio, Ultraje, Cross (de Uruguay), Legión, Devastación y tantas otras que corrieron diferentes suertes. La popularidad creciente del grupo hizo pensar en que ya era tiempo de sacar el disco. Corrían tiempos muy duros en Argentina: la hiperinflación azotaba a la gente y la incertidumbre era constante a la hora de realizar cualquier proyecto. Volviendo al disco, la banda recibió un ofrecimiento de parte de Luis Alacrán, editor de la publicacion underground "Rebelión Rock", que consistia en editar, distribuir y promover a Hermética de manera independiente, es decir venderlo en el parque centenario y enviarlo al interior por correo, Hubo sondeos del sello EMI, pero no llegaron a buen puerto. Casi enseguida recibieron la propuesta del novel sello Radio Trípoli (quienes no tenían ni una oficina en aquel entonces), quienes se conectaron con Marcelo Tommy, manager del cuarteto en aquellos días, y ésta (mucho más concreta) prevaleció. Después de V8, Ricardo Iorio habia declarado "que no pensaba grabar más", refiriéndose a las desfavorables condiciones en que siempre lo había hecho. No quería volver a hacerlo mal. Esto provocó una reaccion del responsable de "Revelión Rock" quien había interpretado que la banda no quería grabar más profesionalmente , y al despreciar su propuesta se había "vendido". Lejos de esta polémica estéril, en mayo, tras las consabidas negociaciones, se firmó el contrato. En el mismo se especificaba que el sello se haría cargo de la producción de los shows. Dos meses más tarde entraron a grabar (en los estudios Sonovisión, con el ingeniero de sonido Alvaro Villagra), y en noviembre vio la luz "HERMETICA", su álbum debut. A pesar de los problemas económicos, fue un pequeño gran éxito, que hasta ahora no ha parado de venderse. Musicalmente alcanzó un gran nivel: crudo, potente y despiadado, en este estilo marcó un limite con todo lo que se había grabado antes en nuestro país. Algunos temas alcanzaron notable repercusión entre las huestes heavies, como "Craneo Candente", "Masa anestesiada" y "Desde El Oeste" (por primera vez Iorio cantó un tema entero en un disco), debido a sus letras que reflejaban muchos aspectos de la realidad que vivían (y viven) los jóvenes. El álbum fue el primer escalón que trepó el grupo hacia una mayor popularidad, ayudando a transmitir mejor su música y sus ideas. Continuaron los conciertos, matizados por viajes al interior, por ejemplo a Córdoba, donde tocaron en el Estadio Del Centro, junto a Hammer. En diciembre de este año, durante un concierto que la banda realizó junto a Nepal en "Detroit", un boliche situado en la zona de Mataderos, Alberto Zamarbide (ex-cantante de V8)subió al escenario para cantar el clásico "Destruccion". El público deliró de felicidad al escuchar uno de sus temas favoritos. El año se fue sin mayores eventos, salvo los conciertos realizados junto a Pappo y los Windowmakers en el extinto boliche "Satisfaction" en la ciudad de Mar Del Plata.

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